Todo el mundo ha perdido la llave de su casa en un momento concreto o ha dejado las llaves puestas por dentro con lo que se ha tenido que quedar fuera esperando que viniera un cerrajero de Parla, por ejemplo, para abrir. No en vano, contar con un profesional en cerrajería que cuente con las herramientas adecuadas para abrir la puerta es una excelente garantía de que el trabajo se va a realizar de manera correcta y sin desperfectos.
Una de las herramientas más conocidas para abrir una cerradura es la ganzúa. Esta permite abrirla sin necesidad de utilizar la fuerza simplemente manipulando el cilindro de la cerradura con el objetivo de que los pistones que hay en el interior cedan y se abra la puerta. Hay diferentes tipos de ganzúas dependiendo de su uso. Las llaves de tensión son también muy usadas en cerrajería. Sirven para aplicar presión en la parte interior de la cerradura para liberar los pasadores hasta conseguir que se abra.
Con las llaves de percusión se puede abrir una puerta con el método bumping. Hay que introducirla en el ojo de la cerradura y cuando esté dentro, golpear la parte trasera con ayuda de un martillo. Esto hace que salten los pistones interiores y se pueda abrir desde el exterior la puerta. Por otra parte, están los extractores de cilindros. Como indica su nombre, saca el cilindro de la cerradura, siendo este la pieza clave de este elemento. Aunque no es el método preferido por los cerrajeros, en ocasiones tienen que usarlo.